El gerente general de Armasur, Manuel Bagnara, se refirió a las propuestas que existen para abrir el cabotaje de carga y personas, indicando que el gremio no estaría en desacuerdo de alternativas que alienten la competencia. Sin embargo, afirmó que -para eso- se debe garantizar la “igualdad de condiciones”.
En entrevista con PortalPortuario.cl, Bagnara también apuntó que cualquier modificación que se haga a la legislación vigente debe tomar en cuenta la experiencia internacional que no ha tenido, a su juicio, éxito en los países donde se ha producido la apertura.
¿Cuál es la postura de Armasur frente a la posible apertura del cabotaje?
Como gremio, nosotros nosotros no tenemos ningún inconveniente, sino por el contrariocreemos que cualquier cosa que favorezca el mercado del cabotaje es bienvenida, pero también como Armasur entendemos que para que haya una verdadera libre competencia, todos los actores deben competir en igualdad de condiciones con los mismos impuestos y las mismas leyes laborales.
¿Cómo debería abordarse este tema?
Cualquier modificación que se haga a la ley de cabotaje tiene que respetar el tenor literal del artículo 1 de la ley de fomento de la Marina Mercante que señala que la política naviera permanente es fomentar y favorecer el desarrollo de su Marina Mercante en armonía con los intereses generales. Además, cualquier modificación que se haga debe considerar la experiencia internacional.
¿Por ejemplo?
Argentina abrió su cabotaje, perdió su marina mercante y lo cerro. Perú hizo lo mismo, Nueva Zelanda y Australia también van de vuelta, porque se dieron cuenta que no era bueno. Nosotros como gremio estamos invirtiendo en carreras universitarias que se están abriendo en la Universidad de Los Lagos y todo eso se va a perder, se va a perder todo lo que están haciendo los gremios por fomentar la marina, entonces esto es como el Sillón de don Otto, es el camino más fácil ¿y por qué no hacemos el camino de verdad? y modernizamos la Marina Mercante.
¿Cómo?
Todos los países del mundo tienen una legislación internacional, pero adecúan estos documentos a la realidad nacional. Nueva Zelanda tiene una reglamentación distinta para aguas interiores ajustada a su realidad. No se necesita un práctico para capitanes que atracan todos los días un barco acá (Puerto Montt al sur). Un barco con capitanes chilenos en aguas interiores y con la experiencia necesaria no necesitan las mismas exigencias. El tema de titulación también es muy lento, porque para titularse un tripulante que parte hoy en Valparaíso llega a otro lugar en tres o seis meses arriba del barco para titularlo, así que hay que echar un vistazo a los reglamentos que tiene la Armada a las leyes para hacer más dinámica esta industria que sigue regida por temas legales del Siglo XIX.
¿Qué otras cosas restan dinamismo a la industria?
En Puerto Montt, un barco nuestro para hacer un zarpe puede estar en el mezón hasta 4 horas esperando y esas cosas perfectamente, y estamos trabajando con la Armada en ello, podrían hacerse vía electrónica, con un smartphone como lo tiene Perú. Hoy pagamos una brutalidad en faro y baliza, en zarpe y recalada, cada vez que nos revisan los papeles te cobran, entonces esas cosas hay que verlas, porque somos la única industria que paga por ser fiscalizada, por lo que hay muchas cosas que se pueden optimizar, porque nuestros barcos van y vuelven dos veces por día, pero se nos mide con la vara de aquellos de comercio exterior que tienen una realidad distinta, nuestros barcos van pegados a la orilla.
Entonces ¿La legislación está añeja?
La Autoridad Marítima tiene la mejor de las voluntades, pero hay temas legales que revisar y modernizar. Todavía tenemos en los reglamentos la figura del fogonero y el doctor a bordo, entonces son cosas que encarecen.
Pensando en los puertos que reciben cruceros que se han mostrado abiertos al cabotaje de personas ¿Qué visión tienen ustedes?
Nosotros no tenemos ni un problema en competir, pero hay que tener en cuenta que un barco extranjero de cruceros no paga IVA ni ILA, no tributan en Chile porque tienen bandera de conveniencia, tienen también leyes laborales bastante más laxas que las nuestras, por lo que si nos igualan las condiciones, de acuerdo, compitamos.
¿Y los navieros chilenos, fundamentalmente los de sur, podrían ofrecer itinerarios turísticos a todo el país?
Si fuéramos competitivos, si tuvieramos los mismos costos que tienen las naves internacionales por volumen, yo creo que sí. Acá tenemos empresarios que serían capaces de tener esos barcos navegando por allá.
Pero ¿Cree que el cabotaje de personas abierto a naves extranjeras pudiera impulsar ese turismo en Chile o difiere de esa idea?
Eso es discutible, porque -en el fondo- un pasaje de esos no es barato, no es popular.
O sea no habría beneficio real en los puertos receptores de cruceros…
A ver, pongamos las cosas como son: El filete hoy día, la parte sabrosa de estos cruceros, es de Puerto Montt al sur, de Puerto Montt al norte no tienen ni un valor, porque es navegación bastante más expuesta, pero también los cruceros internacionales lo que venden es el interior del crucero y lo que venden nuestros cruceros es el exterior, porque son experiencias outdoor, nuestros cruceros no tienen mall, no tienen casino.
De todos modos esto ha ido avanzando en el Congreso…
Pensar que nosotros no paguemos IVA, Impuesto a la Renta, veamos que dice Hacienda, ese es un tema que hay que revisar. Creo que el tema de los cruceros es algo que hay que estudiar bien, porque se ha tomado muy a la ligera. Cuando la gente de puertos dice que esto va a favorecer a los homeport y su economía local porque las lechugas se van a poder vender ahí es mentira, porque una naviera grande no le va a comprar a la señora Juanita, entonces se está armando un tema al cual no nos oponemos, pero discutámoslo, porque ha sido muy acelerado y si una de las cosas que dicen para justificar esto es que han disminuido los cruceros en Chile, eso también es falso, porque creció 34%, según publicaron los medios.